Categoría: Fragmentos a su imán

Comprobaría de esta suerte, valga el caso, que los grises violáceos de las nubes cambian y se desbaratan dentro deSeguir leyendo

Lo haré un atardecer, cuando el aire se mueva. Si escojo bien el instante, quizá nos lleve el viento alSeguir leyendo

Curiosa nación la que me dio el origen y largo y lánguido camino el que hasta aquí me trajo, llenoSeguir leyendo

Arena hasta donde se pierde la vista, entre las últimas colinas y el mar –el mar– en el aire fríoSeguir leyendo

Después siguió adelante rápidamente, pero no tanto como para no tener tiempo de preguntarse, al tiempo que sentía una remotaSeguir leyendo

Tú, dios de esa gran vastedad, refrena ese oleaje que se levanta soberbio y amenazante ante nosotros que yacemos inermesSeguir leyendo

Azules como acero y ligeras, movidas por un viento contrario suave y apenas perceptible, las ondas del mar se desplazabanSeguir leyendo

Finalmente convertida, pero a causa de sucesos posteriores, en referencia casi obsesiva a lo largo de la desagradable aventura deSeguir leyendo

Y un avión que se adentró en el cielo para esfumar una esperanza. Pero no, no te equivoques: no esfumóSeguir leyendo

Desde que recuerdo, la línea entre la fantasía y la realidad ha estado siempre irremediablemente borrosa. He tardado casi todaSeguir leyendo