GAP Andrés Molina Enríquez

Jornadas Cervantinas 2024

El martes 16 próximo damos inicio con las Jornadas Cervantinas 2024, organizadas conjuntamente entre el Espacio Cultural San Lázaro, el Centro Cultural Santa Fe del Congreso del estado de Guanajuato, el Museo Iconográfico del Quijote y el Centro de Estudios Cervantinos, ambas instituciones también de Guanajuato.

La ocasión para todo esto se debe a la circunstancia de la relación que hemos establecido entre las secretarías generales de la Cámara de Diputados y del Congreso del estado de Guanajuato a efectos de replicar allá el esquema del ECSL, que es lo que se ha logrado con la creación del Centro Cultural Santa Fe.

Una vez hecho lo cual, se pensó en la idoneidad de aprovechar el potencial histórico-cultural de Guanajuato en su calidad de capital mundial del cervantismo por virtud de ser la sede anual del Festival Internacional Cervantino, sin perjuicio de que, desde nuestra perspectiva, ese cervantismo está ya de alguna manera difuminado –¿olvidado incluso tal vez?– en el despliegue del Festival, para levantar en todo caso, y en función de esto mismo, una pista de trabajo que pudiera tener a esos elementos como claves de su contenido y definición: tal es el sentido que se persigue sustanciar con las Jornadas Cervantinas y el ciclo mensual de charlas cervantinas “Este que veis aquí”, organizados entonces con el objetivo estratégico de iluminar, revalorar y difundir al Quijote, a Cervantes y al cervantismo no ya nada más como figuras fundamentales de la cultura, sino como elementos constitutivos de una forma de ser y de estar en el mundo desde la perspectiva de la definición geopolítica de cultura de la que hablé aquí hace un par de semanas, tomando como objetos fundamentales de la misma a la lengua española, los libros y la literatura en un encuadre que, además, tiene la consistencia suficiente como para levantar la estatura y rango de una filosofía de la historia dentro de la que México es la nación –y tal vez lo haya sido desde sus inicios virreinales novohispanos– de mayor protagonismo histórico.

En tal sentido, las Jornadas se configuran como un foro internacional de discusión y estudio desarrollado anualmente entre las ciudades de México y Guanajuato –una fecha en CDMX, dos en Guanajuato– pero trazando una ruta alterna de desarrollo que estará centrada no ya en las actividades artísticas, ámbito propio y exclusivo del Internacional Cervantino, sino en las de tipo filosófico, histórico y cívico-político.   

Para la primera edición de las Jornadas, tomamos como pretexto la bella anécdota de Eulalio Ferrer, fundador e inspirador del Museo Iconográfico del Quijote, en la que recuerda haber llevado consigo, durante sus días de cautiverio en los campos de concentración franceses, un volumen ajado de Don Quijote de la Mancha en miniatura que obtuvo a cambio de una cajetilla de cigarros y que cumplió una función de sostenimiento y refugio en medio de la hecatombe –son palabras de Fernando Benítez–, y que acaso haya obsesionado a Ferrer por estar leyéndolo en segunda lectura en un “clima de ideales en derrota que han de triunfar”.

La anécdota puede ser tomada como punto de apoyo de un conjunto de ideas y cuestiones de mucho mayores alcances asociados a la función del libro como objeto de la cultura y de la producción, además de forma o símbolo de una ideología (como por ejemplo el Manifiesto del Partido Comunista o El Príncipe), una religión (como la Biblia o el Corán) o una visión histórica (como Don Quijote de la Mancha, efectivamente), con alcances y repercusiones políticas y sociales de entidad considerable en función de las cuales nos sea posible dibujar un panorama problemático propicio, en definitiva, para la discusión, el intercambio de ideas y la afirmación histórica de México como principal potencia hispanohablante del mundo, de la historia, del presente y, sobre todo, del porvenir.