Antonio Gramsci

Risorgimento. La Constitución española del 12

Antonio Gramsci | Cuadernos de la cárcel. Tomo III. Cuaderno 6, 1930-1932 [Miscelánea]

¿Por qué los primeros liberales italianos (en el 21 y después) eligieron la constitución española como su propia reivindicación? ¿Se trató solamente de un fenómeno de pereza mental? Sin olvidar completamente la influencia de estos elementos, expresión de la inmadurez política e intelectual y por lo tanto del indiferentismo de las capas dirigentes de la burguesía italiana, es preciso no caer en le juicio superficial de pensar que todas las instituciones italianas hayan sido importadas del extranjero mecánicamente y sobrepuestas a un contenido nacional refractario. Por otra parte, hay que distinguir entre Italia meridional y el resto de Italia: la reivindicación de la Carta Española nace en la Italia meridional y es acogida en otras partes de Italia por la función que tuvieron los prófugos napolitanos en el resto de Italia después de la caída de la República partenopea. Ahora bien, ¿las necesidades político-sociales de la Italia meridional eran verdaderamente muy diferentes a las de España? El agudo análisis hecho por Marx de la Carta Española (cfr. el escrito sobre el general Espartero en las obras políticas), y la clara demostración de que aquella carta era la expresión exacta de las necesidades históricas de la sociedad española y no una aplicación mecánica de los principios de la Revolución Francesa, inducen a creer que la reivindicación napolitana fue más «historicista» de lo que parece. Habría que retomar aquí el análisis de Marx, confrontarlo con la Constitución siciliana del 12 y con las necesidades meridionales: la confrontación podría continuar con el Estatuto albertino.